jueves, 8 de noviembre de 2007

Invitación



El 26 de noviembre de 2006, en la esquina de avenida Vallarta y Enrique Díaz de León, Néstor Alan murió al ser impactado por Christian Arias de la Torre y Xavier Álvarez del Castillo Iñiguez, quienes conducían a exceso de velocidad, jugando carreras bajo los efectos del alcohol.

A casi cuatro años y a pesar de que se ha tenido contacto con la Comisión Estatal de Derechos Humanos, Comisión Nacional de Derechos Humanos, el Congreso de la Unión, el Congreso del Estado, el Poder Ejecutivo Federal, el Gobernador del Estado de Jalisco y El Poder Judicial del Estado, el proceso ha sido lento, desgastante y poco transparente.

Todos formamos parte de una comunidad, por lo que no debemos dejar que este tipo de atentados en contra de la justicia sigan sucediendo. Somos nosotros quienes permitimos que las autoridades abusen de su poder. El caso de Néstor es un ejemplo de algo que le podría suceder a cualquiera.

Los accidentes viales ocasionados por gente irresponsable, manejando a altas velocidades y en estado de ebriedad, siguen sin freno. Por lo visto, la lección no ha sido aprendida.

Ejerzamos una ciudadanía activa y responsable, acompáñanos el próximo viernes 26 de noviembre en el cruce de Vallarta y Enrique Díaz de León. Planeamos estar de 14:00 a 15:00 horas de manera simbolica repartiendo volantes, como parte de la memoria colectiva, que no se olviden los actos de impunidad e influyentismo que lleva a cabo la autoridad abusando de su poder.

Cordialmente se extiende la invitación a la misa de aniversario que se realizará el mismo día a las 19:00 horas en la Capilla de los Angeles (ubicada en calle Prado, entre Prisciliano Sanchez y madero).

Por tu apoyo, te damos las gracias.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Recuerdo bien la noche del accidente. Vivo a unas escasas cuadras de Vallarta, venía de regresó, y observé las patrullas alrededor del vocho.

Se me partió el corazón al saber que fue un joven la víctima y que la causa estuvo ligada a unas "carreritas" en plena avenida en la que circulan miles de automóviles y caminan indefensos peatones.

Las dos personas involucradas me resultan una piltrafa de personas, a los que no les deseo mal, pero sí el que la carga de conciencia no los abandone nunca y los carcoma diariamente.

Admiro el valor de los padres y amigos de Néstor, y aplaudo que los medios y la sociedad civil se organicen para combatir este evidente nepotismo.

Sepan que las personas los apoyamos, y que desde nuestro hogar y oficinas, pedimos por la justicia de un ciudadano común, uno que es como nosotros y al que velaremos hasta que la justicia haga su parte.

Anónimo dijo...

Estamos con ustedes y de verdad me da gusto que sigan en pie para que se haga justicia, hay más gente que los apoya para cualquier cosa que necesiten, somos mas esperando por una respuesta...

Javier Neri y Familia Huizar